ANTE LAS PRÓXIMAS ELECCIONES


En plena vorágine de campaña electoral, ...uno no puede por menos que asombrarse ante lo que vaya a resultar, al final, tras las elecciones. Quienes estuvieron en las cúpulas del poder eternamente en España--¿hay que decir que la Iglesia y con ella todos los que configuran el poder económico, militar, social, influyente, caciquil, terrateniente y demás?-- y nunca lograron que España saliera del marasmo de su miseria, de su atraso secular, de su lamentable situación social, resulta que vienen ahora prometiendo el oro y el moro, la gloria bendita, la paz eterna, el cielo y la tierra, vacaciones perpetuas, pan abundante, casas cómodas y gratis, el futuro asegurado y, por si todo fuera poco, la lámpara de Aladino maravillosa para que hagamos lo que se nos antoje. Y, además, e vacaciones siempre.
El partido de las dos pes, en estas cosas, parece que le hizo la boca un fraile. Va a ser tanto lo que nos va a dar, si gana, que España va a ser un oasis mágico, rodeado no de arena por todas partes, sino de miseria, llanto y espanto; sólo con ellos sera posible la gloria; sólo con ellos las ideas están claras; sólo con ellos nos asistirá Dios... ¿De dónde salieron que esa varita mágica que tanto bien nos va a traer? ¿No son, por desventura, los herederos de quienes siempre rigieron en España los destinos --¿imperiales?-- y nunca hicieron nada, para que esta comunidad saliera del pozo de los atrasos y las penurias como dicen que van a hacer ahora? ¿O estos que tanto prometen son otros y de otra raíz y de otra estirpe?
Con todo, lo que más asombra y consterna es, en esta España actual, que tantas lágrimas lloró y sudor le costó, que haya entre la clase trabajadora existente gentes que hayan vuelto la espalda a sus orígenes, a sus muertos y desaparecidos; a sus padres perdidos en los tajos del mar y de la mina, a sus orígenes...y voten a quienes, históricamente, siempre estuvieron enfrente. ¿O no fue el poder contrario a la clase baja en España?
A Cristo también le negó Pedro tres veces. También le traicionó Judas; Pilatos se lavó las manos y en el templo lo ignoró Caifás, sumo sacerdote ... ¿De que nos extraña que, pese a tanta opresión padecida, haya quien se venda por un plato de lentejas? En mis tiempos mineros, a esa gente se le llamaba arrastrados, miserables, serviles, lameculos, traidores...los cuales, naturalmente, eran despreciados de todos los demás.
Actualmente, renegando de sus orígenes, hay quien vota a los que, por lo general, la clase menos privilegiada no vota nunca. Seguramente que quieren dejar de ser del gremio de los trabajadores.
El voto es libre y la voluntad de votar debe serlo igual; pero lo que nos parece que no debe ser a lo que ha sido siempre, es que los trabajadores voten a quienes nunca les han dado ni siquiera lo que les correspondía, que por lo general siempre fue legislado con parquedad. Desde luego, en lo que entiendo, y en lo que soy y del origen que vengo, jamás renegaré. Y por tanto, debo decirlo ya, nunca votaré a partido de derecha que sea, tenga por símbolo un ave carroñera, por siglas dos pes y por norma, prometer la de Dios es Cristo que, naturalmente, ni cumplieron nunca ni van a cumplir ahora. Así que, aunque no siempre esté de acuerdo con los míos, les voy a votar porque siempre he estado a la izquierda de Dios Padre, que es donde me puso la España ésta. Déjenme, pues, que vote izquierda. Esto es, a falta de República, socialismo.AS


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